Materiales no metálicos

Materiales no metálicos

En los primeros aviones fabricados de la historia el metal era muy poco usado debido a que no se exigían tantos esfuerzos como actualmente, y al ser la madera y los tejidos más ligeros que el metal, eran los principales materiales usados. Conforme el tiempo avanzó y los requerimientos de los materiales eran más exigentes, estos productos fueron dejándose de lado, pero aquí se explicará el uso que tenían.

Madera aeronáutica.

Respecto a la madera tenemos que hablar del abeto sitka, el cual, debido a sus propiedades de resistencia y poco peso, así como su facilidad para ser trabajado, fue utilizado en estructuras de las alas y el fuselaje de los primeros aviones fabricados.

Por otra parte, las hélices de aviones de baja potencia antiguos eran fabricadas de tiras de madera de abedul pegadas unas con otras de forma que el grano de cada capa corriera en la misma dirección, su resistencia se distribuía lo largo de su longitud.

La madera contrachapada está hecha de hojas pegadas de tiras delgadas de madera, donde el grano se alterna entre 45° y 90° respecto a las capas adyacentes. Por ejemplo, la madera contrachapada de caoba podía ser usada en la piel de los aviones con un fuselaje de estructura monocoque, mientras que la de abedul se utilizaba junto al abeto para reforzar la estructura del ala y soportar mejor las cargas de compresión.

Tejidos aeronáuticos.

Un tejido de fibra de algodón en un recubrimiento con 80 cuerdas por pulgada en ambas direcciones (de deformación y relleno), fue el material de uso estándar para aviones con estructura reticular, conocido como “Algodón Grado-A”, tiene un peso aproximado de 4 onzas por yarda cuadrada, así como una resistencia a la tensión de 80 libras por pulgada cuadrada. Así mismo, el lino irlandés fue aprobado como de uso aeronáutico para esos primeros aviones debido a que tenía casi las mismas propiedades de resistencia.